30 d’abr. 2008

Un llibre

Aquesta és una recomanació per als lectors, els no lectors i a aquells que havien llegit i ara ja no llegeixen. Us recomano un exercici. Agafeu el capítol VIII del llibre La meva infantesa de Màxim Gorki. Són 19 pàgines per tant no hi ha massa feina. Llegiu-lo a poc a poc, concentrats, d'una tirada i s'hi pot ser al vespre o en un dia que no faci sol.

Crec que no es pot concentrar d'una manera més bestial i bonica l'ànima russa.

Una abraçada a tots.

25 d’abr. 2008

La Puntualitat

La puntualitat és una actitud que s’adquireix des dels primers anys de la nostra vida mitjantçant la formació d’hàbits en la família, a on les normes i costums estableixen horaris per a cada una de les nostres activitats. També és un reflex de respecte al temps dels demés, ja que a l’escola i a la vida social, arribar a temps és un signe de bona educació. Malgrat tot, hi ha persones que contínuament arriben tard i presenten excuses. Això provoca un retard per tots o distraccions que trenquen amb l’ordre de les activitats. Ja sigui a la feina, a l’escola, en una cita o en qualsevol classe de grup social al qual s’hi assisteix. La puntualitat s’ha de complir, ja que totes les persones es mereixen un respecte.
Horace Mann va dir que “La informalitat en atendre una cita és un clar acte de deshonestitat. Igual pots robar els diners d’una persona si robes el seu temps”. Les persones d’èxit són indefectiblement puntuals. La puntualitat és un valor que va més enllà d’estar a l’hora senyalada en una cita o a la feina. És més que això. Senyala l’ordre en que una persona viu i sobretot el respecte que té per les persones amb qui es relaciona.
Hi ha cultures que arribar a temps és senyal de debilitat, això pot ser cert per ells, però per al món occidental arribar a temps és senyal de domini propi i control. Sobretot avui en dia, en aquest món en el que ens ha tocat viure, arribar a temps indica capacitat de preveure diferents circumstàncies. Nicolas Boileau-Despréaux deia: “Procuro ser sempre molt puntual, doncs he observat que els defectes d’una persona es reflexen molt vivament en la memòria de qui l’espera”.
Per ser puntual es necessita fer una planificació adequada, tenir consciència del temps i consideració a l’altre.
Moltes persones són puntuals per certs compromisos i molt impuntuals per altres. En aquests casos, el que falta no és la capacitat d’arribar a temps, sinó l’interès per fer-ho.

¿Emprendedor yo?, ¿Estás loco o qué?

El título de este post, puede ser la respuesta de un alma ingenua que acaba de pasar por el despacho de sus asesores y le han relatado de forma muy escueta todas las obligaciones burocráticas que tendrá por el hecho de crear una empresita.

Por un lado tenemos las fiscales, que si alta de obligaciones censales, que si la contabilidad, que si la obligación de presentar los libros oficiales, que si los pagos trimestrales de IVA, de IRPF, del pago del Impuesto de Sociedades, etc…

Por otro lado tenemos las obligaciones sociales, que si la inscripción del empresario en la Seguridad Social, la obligación de cotizar mensualmente por los trabajadores e ingresar las cuotas, que si la comunicación de los contratos al INEM, los accidentes de trabajo, las bajas laborales, los salarios de los empleados, los problemas con estos, la obligación de cumplir estrictamente con la Prevención de Riegos Laborales, etc…

Y por último las más novedosas (que realmente no lo son, aunque sí en cuanto a su aplicación), como puede ser la Protección de Datos.

Probablemente muchas de estas almas cándidas, no hayan podido soportar la enumeración de obligaciones completas, y hayan exclamado en el primer punto, un rotundo “¡ya está bien, me has convencido, seguiré como estoy!”. Y ciertamente, es como para comprenderlo, hoy día el empresario tiene dos opciones, o bien se forma en leyes y números, o confía ciegamente en sus asesores.

La presión burocrática y las obligaciones son tantas, que realmente al empresario no le quedan otras opciones que las anteriores, y ninguna de ellas es la más aconsejable, pues si uno tiene un negocio, debe dedicarse a él plenamente, pero por otra parte tampoco puede desconocer cómo se está gestionando su empresa en cuanto a sus obligaciones se refiere, por cuanto él es el único responsable de las mismas ante la Administración Pública.

Por ello, mientras la Administración no levante el pie sobre el pedal de la presión burocrática a las empresas, el emprendedor deberá tener una mente abierta y estar dispuesto a desarrollar su negocio, pero también a aprender como gestionarlo.

Porque he visto grandes trabajadores que han creado empresas con un gran porvenir que finalmente no han podido cimentar por falta de los más mínimos conocimientos de gestión, no sólo en cuanto a sus obligaciones, sino en cuanto a habilidades de dirección.

Oscar. Abogado Laboralista.

24 d’abr. 2008

No pensis més, pensa millor

“Había una vez un hachero que se presentó a trabajar en una maderera. El sueldo era bueno y las condiciones de trabajo mejores aún; así que el hachero se decidió a hacer buen papel. El primer día se presentó al capataz, quien le dio un hacha y le designó una zona.

El hombre entusiasmado salió al bosque a talar. En un solo día cortó dieciocho árboles. Te felicito- dijo el capataz – sigue así. Animado por las palabras del capataz, el hachero se decidió a mejorar su propio desempeño al día siguiente; así que esa noche se acostó bien temprano. A la mañana se levantó antes que nadie y se fue al bosque.
A pesar de todo el empeño, no consiguió cortar más que quince árboles. Me debo haber cansado – pensó y decidió acostarse con la puesta del sol. Al amanecer, se levantó decidido a batir su propia marca de dieciocho árboles. Sin embargo, ese día no llegó ni a la mitad. Al día siguiente fueron siete, luego cinco y el último día estuvo toda la tarde tratando de voltear su segundo árbol. Inquieto por el pensamiento del capataz, el hachero se acercó a contarle lo que le estaba pasando, y a jurarle y perjurarle que se esforzaría al límite de desfallecer. El capataz le preguntó:
¿Cuándo afilaste tu hacha la última vez?¿Afilar? No tuve tiempo de afilar, estuve muy ocupado cortando árboles.”
JORGE BUCAY

23 d’abr. 2008

400€

Ayer se publicó en el BOE el RD 2/2008, de “Medidas de Impulso a la Economía”. Para el resto de los mortales los 400 € de Zapatero. Finalmente, y tal como se adelantó desde la campaña electoral se ha articulado una deducción directa sobre el IRPF. No es la primera vez que hablamos aquí de ello, pero quiero evaluar las repercusiones en las empresas de dicha medida.

En primer lugar, para lograr el efecto inmediato y milagroso de la “reactivación del consumo y la economía” este decreto tiene que llevar aparejado una modificación en el Reglamento del IRPF, para modificar los tipos de retenciones de trabajadores, y autónmos obligados a realizar pagos a cuenta, y así se pueda reflejar dicha deducción de manera inmediata. Detalle técnico: si por casualidad los pagos fraccionados son negativos, como que tampoco existe aplicación directa de la deducción.

La modificación más sustancial es la promesa de “aliviar” las retenciones para el mes de junio en 200€. El borrador del reglamento que ha publicado Hacienda plasma la práctica prevista de dichas deducciones. Lógicamente, para recibir dicha bonificación, primero tenemos que tenerla reflejada en nómina, y aquí es donde va a comenzar “la guerra” con los trabajadores.

En primer lugar, el personal “piensa” que a todo “currito” de este pais le corresponden 400 € por la cara en la nómina de junio. Primer “error” grave y dificil de hacer entender a muchos trabajadores equivocados. Partiendo de la premisa que la mayoría, y salvese el que pueda, no sabe ni exactamente que es lo que se deduce en su nómina, apañados vamos para explicar porqué él, sólo incrementa su nómina en 50€ por ejemplo.

En segundo lugar, aquellos que no tengan retenciones esta bonificación como que ni les va ni les viene; por ejemplo contratos de formación, indefinidos de baja cuantía…. como que los 400€ les va a parecer maravilloso, pero como tampoco contribuyen mediante pagos a cuenta del IRPF, pues no ven nada a corto plazo. Obviamente, poco se van a favorecer los trabajadores en situación más precaria.

En tercer lugar, los contratos temporales de duración inferior al año, llevan un mínimo de retención del 2%, y el borrador del reglamento no exime ese mínimo por ningún lado. Además, aquellos que sus retribuciones provegan de carácter especial como Consejos de Administración, conferencias, cursos, coloquios…. los mínimos fijados tampoco se alteran

Y para terminar de poner la guinda a semejante despropósito, existen multitud de acuerdos trabajador – empresa, que tiene un pacto salarial líquido, independientemente de los baremos de IRPF que le correspondan y descuentos a la seguridad social. Los que tengais trabajadores en esta situación, ya podeis ir pensando como vais a salir de semejante entuerto porque el trabajador siempre va a querer 400 € más, que es lo que dice el Gobierno.

El “pastel” que se les viene a las empresas no es moco de pavo. No creo que haya empresa que no tenga problemas con algún trabajador con la medida a aplicar. Respecto a las asesorías ya pueden desenfundar el hacha de guerra, porque el borrador del reglamento se presta a todo menos a una comprensión fácil del procedimiento a aplicar.

En definitiva, es muy fácil pasarle la pelota a las empresas, que sean ellas las que tengan que explicar el lado oscuro de la medida a los trabajadores, crear quebraderos de cabeza a todos los empresarios, y malestar en el seno laboral, porque el trabajador quiere en definitiva los 400€ que dice el Gobierno, y que no le expliques milongas.

Como punto final, para que no creais que sólo las empresas van a tener quebraderos de cabeza, queda otra duda para todos los trabajadores. Aquel que no aplique la deducción vía retenciones la aplicará en su declaración de la renta. ¿Cómo sabremos quién ha aplicado la deducción y quién no? O yo estoy hoy muy torpe o no le encuentro explicación a esta cuestión por ningún lado.

Feliç diada de Sant Jordi

LES ROSES RECORDADES


Recordes com ens duien
aquelles mans les roses
de Sant Jordi, la vella
claror d'abril ? Plovia
a poc a poc. Nosaltres,
amb gran tedi, darrera
la finestra, miràvem,
potser malalts, la vida
del carrer. Aleshores
ella venia, sempre
olorosa, benigna,
amb les flors, i tancava
fora, lluny, la sofrença
del pobre drac, i deia
molt suament els nostres
petits noms, i ens somreia.

Salvador Espiru

21 d’abr. 2008

Els Fons Sobirans

No Tienen Otro Remedio

Desde hace unos meses, cada quince días algún banco importante anuncia un agujero financiero relacionado con las hipotecas “subprime”. De momento, el récord lo tiene Citigroup con un agujero de 24.000 millones de dólares, seguido de Merrill Lynch con 22.500, la Unión de Bancas Suizas con 18.700. Y así, de millardo en millardo, totalizan un agujero global de 181.500 millones de dólares.

¿

Qué pasa cuando esos bancos anuncian pérdidas tan exorbitantes? Pues en circunstancias normales, el precio de sus acciones cae en picado y son compradas a precio de saldo por otra entidad financiera privada (véase el caso de Bear Sterns que cotizaba a 160 dólares por acción hace unos meses y fue adquirida por JP Morgan por cuatro dólares hace unas semanas). Lo interesante, sin embargo, es que durante la presente crisis han aparecido unos nuevos jugadores en la partida financiera: los llamados fondos soberanos compuestos por dinero acumulado por los gobiernos de países productores de petróleo más China y Singapur.

La idea de los fondos soberanos surgió en los años setenta, cuando el gobierno americano decidió poner los recursos que generaba el petróleo de Alaska en un fondo cuyos rendimientos eran repartidos entre los ciudadanos de ese estado. Esa idea fue copiada rápidamente por otros países productores de petróleo para estabilizar sus finanzas: cuando el precio del petróleo está alto, ellos invierten una parte de las ventas en los fondos soberanos. Cuando el precio baje, los ciudadanos podrán vivir, literalmente, de las rentas de esos fondos. Así estabilizan sus economías. Hoy, el mayor fondo del mundo es el de Abu Dabi (que administra 875.000 millones de dólares), seguido por el de Noruega (350.000), el de Arabia Saudita (300.000) y el de Kuwait (250.000). A esos fondos de petróleo se unen los de dos países cuyos gobiernos obligan a los ciudadanos a ahorrar de manera compulsiva (Singapur y China), cuyo monto es ya de 470.000 y 200.000 millones de dólares respectivamente. Se calcula que, entre unos y otros, los fondos soberanos administran cerca de 3 billones de dólares.

Al principio, los fondos soberanos se invertían en bonos del estado, con intereses seguros pero miserables. Poco a poco, compraron empresas privadas para obtener una mayor rentabilidad. Lo que nos devuelve a la crisis financiera actual: durante los últimos meses, se han dedicado comprar o rescatar bancos occidentales con problemas. El fondo de Abu Dabi rescató al Citigroup, el de Singapur rescató a la Unión de Bancas Suizas, el fondo Chino ha comprado parte de Barklays, mientras el de Dubai ha comprado participaciones importantes den Deutsche Bank.

Esta gran inyección de dinero público ha sido bienvenida por el sector financiero occidental ya que, de momento, ha evitado una catástrofe económica… pero ha generado recelo entre los legisladores que no saben exactamente cómo tratar el tema. En Estados Unidos, por ejemplo, los fondos públicos de la seguridad social no pueden ser invertidos en empresas privadas. Ante esa restricción, uno se pregunta: si el dinero público americano no puede invertir en empresas privadas, ¿por qué se deja que lo haga el dinero público de otros países?

En principio, uno debería haber libertad de invertir allí donde uno guste. Pero, ¿los gobiernos también? Existen tres razones que recomiendan limitar la libertad de los fondos públicos. Primero, la regla básica del capitalismo es que las empresas deben intentar maximizar la rentabilidad de los inversores. El problema aparece cuando un socio mayoritario (en este caso el fondo soberano extranjero) tiene “otros” objetivos políticos. Por ejemplo, un fondo de Abu Dabi que compra una empresa de aviación puede intentar promocionar destinos en Abu Dabi no rentables desde el punto de vista empresarial, pero deseables políticamente. Eso perjudicaría al resto de propietarios de la empresa y debe ser impedido.

Segundo, los fondos públicos pueden ser sometidos a presiones políticas que perjudiquen a los accionistas. Ejemplo: no hace mucho, el fondo de Noruega estaba metido en un banco privado que especuló contra la moneda de Islandia. Los accionistas ganaban mucho dinero con esa operación… hasta que el gobierno de Islandia llamó al de Noruega y amenazó con represalias diplomáticas. Noruega obligó al banco privado en el que participaba a dejar de especular y los accionistas perdieron dinero. Tercero, los gobiernos pueden tener la tentación de utilizar las empresas participadas para contratar a directivos no por qué esté capacitados para dirigir esos negocios sino a cambio de favores políticos.

En honor a la verdad, si exceptuamos el episodio de Noruega-Islandia, hasta ahora los fondos soberanos se han comportado de forma impecable por lo que, de momento, los problemas existen sólo a nivel teórico. Dicho esto, es preocupante que, cuando se les ha pedido que firmaran un compromiso de no actuar con criterios políticos, se han negado rotundamente. Y negativa levanta sospechas.

Cuando la tormenta económica haya amainado, el paisaje financiero será peculiar: el dinero público estará infiltrado en el corazón financiero del capitalismo occidental al ser los estados de países extranjeros los propietarios de los principales bancos occidentales. Está por ver si los líderes políticos que tantas trabas ponen a los gobiernos locales para que participen en empresas privadas, hacen la vista gorda a los fondos soberanos porque piensan que no habrá problemas… o porque saben que no tienen otro remedio.

Xavier Sala Martin

8 d’abr. 2008

Calvin&Hobbes




Per als fans de Calvin, si n'hi ha algun (i si hi ha algú...): l'última tira que es va publicar d'aquest gran còmic el 31 de desembre del 95.